Dentro del Gran San Juan encontramos la Capital, reconstruida entre fines de 1940 y 1960, luego de la destrucción total que provocó el terremoto de 1944. Es por ello que carece casi completamente de edificaciones antiguas, lo que la convirtió ediliciamente en “la ciudad más moderna del país”.

La condición de zona sísmica motivó que sean pocos y recientes los edificios que superan los ocho o diez pisos. Allí funcionan las sedes ministeriales, el Poder Legislativo y el Judicial, y los más importantes y numerosos centros de salud, como el remodelado Hospital Rawson, recientemente reconstruido en todos sus servicios y conservado su casco principal como parte de la historia sanjuanina.

El Rectorado de la Universidad Nacional de San Juan, la mayor cantidad de bibliotecas y las sedes de las empresas de servicios, además de centros deportivos se concentran en la Ciudad Capital. Alrededor de la plaza 25 de Mayo, tradicional paseo sanjuanino, se ubican galerías, comercios, bancos y edificios de oficinas, en tanto que las peatonales Rivadavia y Tucumán son las que concentran el mayor movimiento comercial, fuente de ingresos económicos del departamento.

Entre los edificios que fueron restaurados después del terremoto de 1944, en plena Capital están el Convento de Santo Domingo, la Casa Natal de Sarmiento, el Hospital Guillermo Rawson, el Museo de Bellas Artes Franklin Rawson y la Escuela Normal Sarmiento. Por otra parte, la Catedral de San Juan y el Auditorio Juan Victoria son ejemplos de edificación moderna.

En distintos puntos de la capital sanjuanina funcionan museos dedicados a distintas temáticas y ferias de artesanías y exposiciones itinerantes que despliegan su actividad los fines de semana. En los últimos años, la Capital de San Juan ha recuperado espacios que históricamente pertenecieron al ferrocarril y que, restaurados, hoy albergan museos o centros culturales.

La ciudad cuenta también con el imponente Centro de Convenciones, donde se exponen actividades científicas, charlas académicas y otras. Otro atractivo de Capital es el Parque de Mayo, principal pulmón verde de la ciudad, con una gran variedad de especies arbóreas, paseos y fuentes, además del original reloj empotrado en el jardín, la isla artificial y el Monumento al Deporte. Dentro del ejido capitalino se encuentran también numerosas plazas y paseos, casi todas ellas caracterizadas por la presencia de fuentes de agua.